De premios y otras zarandajas

No voy a criticar el premio concedido al Presidente Rodríguez por parte de la Asociación Progresista de Mujeres, cada uno concede los premios a quién le parece. Eso sí siempre que lo concedan a costa de sus bolsillos, porque si esta asociación solicita y le asignan fondos a cargo de los presupuestos generales (o sea a costa de todos) empieza ya a tocar un poco ... las narices.

Pero lo que más toca las meninges, hasta el punto de inflamarlas en grado que roza lo patológico es el discurso del premiado. Va el premiado y comenta que la ley de igual da d es un gran avance ya "que las sociedades donde hay igualdad, hay mayor libertad en definitiva más democracia".

Quiero pensar que no leyó el discurso que tenía preparado y que improvisó algo que sonara bien, que sonara a progresista (por quedar bien con la asociación que le premiaba), sin pensar en sociedades donde la igualdad estaba conseguida desde mediados del siglo pasado y donde la democracia y la libertad brillaban y brillan por su ausencia.

Que dirá el moderado presidente, defensor de las mujeres (que por cierto no recuerdan haber pedido defensa) y autocalificado como rojo de las sociedades de los países del este del muro (antes de la caída) o de la sociedad cubana. Es posible que no critique a la segunda ya que es el apoyo internacional que tiene actualmente, pero creo que cualquiera de los emigrantes de los países de la Europa del Este le podrían ilustrar sobre las cualidades democráticas en sus países hace unos años.

En fin que premien a quien quieran con su dinero o con el de todos (es un hecho dificil de cambiar por ahora), pero al menos que no me tenga que tragar semejantes tonterías en los telediarios.